El polvo para hornear es un ingrediente esencial en la repostería, usado para hacer que las masas y mezclas se hinchen y se vuelvan esponjosas. Actúa liberando dióxido de carbono cuando se mezcla con líquidos y se calienta, lo que causa que la masa se expanda.
¿Cómo funciona?
El polvo para hornear generalmente contiene bicarbonato de sodio, un ácido (como el cremor tártaro) y un almidón. Cuando se mezcla con líquidos, el ácido y el bicarbonato de sodio reaccionan, produciendo burbujas de dióxido de carbono. Estas burbujas quedan atrapadas en la masa, lo que hace que se infle. El calor del horno expande aún más estas burbujas, resultando en un producto horneado ligero y esponjoso.
